Las fotografías de Anh Sun Mi sorprenden por la sutil combinación de adolescencia y sensualidad. Imágenes que rozan lo poético y lo intangible para demostrarnos que se puede sentir al mismo tiempo como niño y como adulto, que la inocencia no está reñida con la voluptuosidad.
De la misma forma, sus autorretratos, para los que muchas veces utiliza la doble exposición, reconvierten el sueño, lo retuercen y lo hacen más onírico si cabe, jugando con el espectador, invitándole a pensar en su propia fragilidad, mientras una amalgama de texturas envuelve sus sentidos; suaves tonalidades que, en ocasiones, rompe con un vivaz contraste.
Y con todo, en su obra vemos lo que para muchos supone el complejo paso de la niñez a la edad adulta, terrores buscados, descubrimientos diarios, impensada dualidad, sexualidad a flor de piel, crecimiento…. ¿realmente queremos abandonar ese estado?
Ahn Sun Mi | Web