Con la mujer como gran protagonista de su obra, Btoy, reconocida como una de las mayores exponentes del Street Art nacional, recoge personajes que despiertan la admiración de cualquier mujer (y de muchos hombres) aquellas que lideraron el imprescindible e inevitable cambio social que supuso vencer la enorme discriminación que desgraciadamente hoy perdura y no solo en sociedades consideradas poco “evolucionadas”, así ha pintado a la Pasionaria, Frida Kahlo o Susan Sontag, todas, revolucionarias y feministas, o flappers, aquellas mujeres que en los años 20 rompieron barreras reivindicando ciertas libertades.
En general, a nivel de arte contemporáneo hay muchas menos mujeres que hombres porque la sociedad inculca ciertos miedos que provocan ese desequilibrio.
En su trabajo encontramos rebeldía y reivindicación y no únicamente en lo relacionado con las diferencias por razón de sexo, hallamos crítica social en cuanto hace, de una forma u otra, la autora nos pone delante un sinfín de injusticias, quizá con la intención de que seamos nosotros los que valoremos si queremos o no vivir en una sociedad capaz de tales aberraciones o preferimos hacer algo por cambiarla.