Material Ecology de Nery Oxman como muestra de evolución
La arquitecta israelí nacida en Haifa, Neri Oxman, es profesora en el MIT Media Lab en EE.UU. donde dirige el grupo Mediated Matter. Su trabajo es una combinación de diseño, ingeniería de materiales, computación y biología.
Investiga la interacción entre lo físico, lo digital y lo biológico combinando todos los elementos, siempre hacia una biología informada inspirada en la naturaleza.
A través de la exposición Material Ecology que ha podido verse en el MOMA hasta el pasado 25 de mayo, podemos adentrarnos en la evolución de la investigación realizada por la artista a lo largo de 15 años de trabajo. A través de sus investigaciones propone fórmulas de sostenibilidad del planeta. La muestra fue organizada por Paola Antonelli. Curadora Senior, Departamento de Arquitectura y Diseño, y Directora de Investigación y Desarrollo; y Anna Burckhardt, Asistente comisariado.
Síntesis de biología y tecnología
Uno de los diseños es una fascinante estructura creada a partir de la quitina, que es el segundo biopolímero más abundante; se encuentra en insectos, artrópodos, crustáceos (por ejemplo, en camarones y alas de mariposas).
Otros proyectos en la exposición incluyen Aguahoja (2018), que despliega algunos de los biomateriales más abundantes de nuestro planeta, como la celulosa, quitina, carbonato de calcio, almidón de maíz y pectina. Derivados de cáscaras de camarón y hojas caídas, estos materiales se imprimen en 3D con un robot, tienen forma de agua y se aumentan con pigmentos naturales para crear compuestos biocompatibles con gradientes funcionales de propiedades mecánicas, químicas y ópticas.
Cada objeto está diseñado como una columna, un tótem químico, y se inicia con la tirosinasa, una enzima de un hongo cuya reacción permite sintetizar la melanina. Una propuesta arquitectónica a gran escala para una estructura de vidrio infundida con melanina y sensible al medio ambiente es parte de un proyecto a largo plazo iniciado por Design Indaba, una conferencia anual de diseño en Ciudad del Cabo, Sudáfrica.
Neri Oxman y su grupo de trabajo Mediated Matter Group, crea Totems 2018. Un proyecto que utiliza la melanina sensible al medio ambiente, fue diseñado por Desing Indaba, un proyecto para contener múltiples capas de melanina que anteriormente estaban tratadas en el laboratorio, permitiendo así protección UVA durante el día, tiempo que les permite observar las estrellas al anochecer.
Enhebrar seda a través de la tecnología.
Un programa CAD para controlar la producción
El proyecto más ambicioso que crea Oxam es el titulado El Pabellón de Seda, en el que explora la relación entre la fabricación digital y la creación biológica, tanto para productos como para escalas arquitectónicas. Ha creado láminas brillantes de un material hecho de una pasta de cáscaras de camarones molidas, que varía de opaca a translúcida y está incrustada con bacterias diseñadas para capturar carbono y convertirlo en azúcar.
O un sistema digestivo portátil que incorpora bacterias fotosintéticas para convertir la energía solar en azúcar.
Tras pegar un pequeño imán a la cabeza de un gusano, consiguió la imagen tridimensional de cómo un gusano crea un capullo. El hallazgo permitió a Oxman desarrollar un programa CAD para controlar su producción. Se construyó un andamio de aluminio y se usó un robot CNC para enhebrar una red de hilos de arranque de seda en patrones que proporcionarían una base para que trabajasen los gusanos.
El marco de aluminio y cuerda fue colgado en un atrio en el MIT y en sus bordes colocaron los 6.500 gusanos que había adquirido. Jilaron, se reprodujeron y se metamorfosearon, produciendo seda por un total de 6.500 km. (curiosamente, la longitud aproximada de la real Ruta de la Seda). Así, consolidaron la estructura básica de seda artificialmente tejida con su seda tejida natural o biológicamente.
El proyecto es un híbrido único de ingeniería estructural y biológica. Usando sus herramientas CAD desarrolladas a medida, Oxman pudo controlar las propiedades del material del pabellón de la misma manera que un arquitecto especificaría un cierto tipo de acero para usar en un edificio. La densidad de las cadenas de inicio determinó la opacidad de un panel dado.
La integridad de la estructura surgió de su orientación. La salida no se puede controlar por completo, pero el comportamiento emergente de los gusanos pueden conducir a texturas y características inesperadas que serían imposibles de planificar.
Impresoras 3D constructoras de estructuras a gran escala.
El concepto de usar gusanos de seda para la ingeniería estructural, por extraño que sea, tiene varios beneficios. “El gusano de seda encarna todo lo que un sistema de fabricación aditiva carece actualmente”, dice Oxman. “Emite un material estructural con propiedades variables superiores de función específica; es de tamaño pequeño y móvil en movimiento; y puede generar, en lugar de imprimir, estructuras fibrosas no homogéneas sin desperdicio”.
En más de una forma, un gusano de seda es una sofisticada impresora tridimensional de múltiples materiales y varios ejes. La mayoría de las impresoras 3D de hoy en día tendrían dificultades para imprimir algo más grande que el volante de un automóvil, pero con un poco de ayuda, estos “MakerBugs” pueden construir estructuras del tamaño de casas pequeñas.
El proceso es tan respetuoso con el medio ambiente como podría ser: los gusanos transforman las hojas de la morera, en material de construcción. Sus creaciones se biodegradan con el tiempo, y, cuando se hace el trabajo, los gusanos se convierten en polillas y vuelan, dejando suficientes huevos para crear aproximadamente 250 estructuras más.
Un cambio de comportamiento hacia la evolución científica,
desde el amor a la naturaleza.
Las posibles aplicaciones son variadas, pero incluyen la moda y la arquitectura, y es posible imaginar la puesta en marcha de un sistema como este después de un desastre natural para construir refugios amigables con el medio ambiente para los refugiados, si pudieran superar la noción ligeramente aterradora de vivir en lo que parece ser una telaraña gigante.
“El proyecto especula sobre la posibilidad en el futuro de implementar un enfoque de enjambre biológico para la impresión 3D”, dice Oxman. “Imagine miles de gusanos de seda sintéticos guiados por condiciones ambientales como la luz o el calor, que respaldan la deposición de materiales naturales utilizando técnicas distintas a la estratificación”.
Neri Oxman, va más allá, nos hace cuestionar. ¿Qué pasaría si construyéramos estructuras que aumentaran la vida?. ¿Si una estructura digital consigue que un gusano se metamorfee, podemos reconstruir la vida?. ¿ Podemos convertir la luz en azúcar?. ¿Conseguiremos revolucionar la industria textil?. ¿La vida digital puede aumentar la vida biológica?.
Toda una apuesta por la belleza que como dice la artista, está inspirada en la naturaleza y abre todos los sentidos tanto estéticos como intelectuales, a la posibilidad sostenible de salvar el Planeta.
Imagen destacada: Portrait of American Israeli designer Neri OxmanImage Credit: Noah Kalina (2017)
Todas las imágenes: Courtesy of Neri Oxman and The Mediated Matter Group. Web