Colectivo Offmothers y sus domésticos animales
Para constituir el Colectivo Offmothers se unieron en 2014 mujeres de disciplinas tan dispares como la sociología, la fotografía, la música, las artes plásticas y la filsosofía. Susana Carro, Elena de la Puente, Natalia Pastor, Roxana Popelka, Blanca Prendes, Gema Ramos y Eugenia Tejón. Siete mujeres distintas que en la muestra ”Animales domésticos” exponen siete casas homogéneas en su blancura, idénticas en su sencillez, similares incluso en un detalle: todas invitan a observar su interior.
Y es al indagar, observar y escuchar lo que sucede en esos espacios análogos cuando nos encontramos con los animales domésticos, es decir, mujeres y madres en el hogar. Pues el colectivo Offmothers utiliza el poder de seducción del arte para relatar cómo el hogar doméstica a las mujeres al dificultar el desarrollo de sus proyectos existenciales y barrer las diferencias que las individualizan.
La exposición “Animales domésticos” permanecerá en el Centro de Cultura Antiguo Instituto de Gijón hasta el próximo día 24 de septiembre y, en el texto que aparece a continuación, el propio Colectivo explica la línea argumental de la muestra.
La casa como obstáculo
El término “casa” denota un espacio, una extensión limitada para el asentamiento y basta una simple ramada de tallos trenzados para dejar constancia de la demarcación entre un lugar interior frente al exterior. Más tarde vendrán las arquitecturas, las conductas asociadas al abrigo o a la intemperie y las expectativas o valores que, con el tiempo, hacen de la casa el locus de la familia y, finalmente, el hogar.
Y en el devenir de la casa como espacio hacia la casa como hogar existe toda una construcción conceptual en la que la modernidad es artífice inexcusable. A Rousseau le debemos que la dicotomía entre razón y pasión se traslade a la teoría política moderna como distinción entre el ámbito público y privado.
Recluido lo emocional al ámbito de lo privado y nombradas las mujeres como fieles guardianas de los sentimientos se produce la paulatina transformación de la «casa» como centro de producción, al «hogar» como cálido refugio para el marido, escuela de virtudes para el niño y de buenas maneras para la niña.
Del siglo XVIII a nuestros días las arquitecturas de la casa se han sucedido y evolucionado, auténticas revoluciones tecnológicas y cambios de paradigma estético frente a los cuales una constante se resiste: la mujer como parte inexcusable de la casa. Sin negar los avances conseguidos en materia de equidad, a día de hoy, son numerosas las situaciones en las que trascender el ámbito de lo doméstico es algo que, a las mujeres, se nos dificulta más que posibilita.
Y esa obstaculización no hace sino construirse a partir de la identificación de la mujer con el hogar y la crianza; la “mujer doméstica” domesticada para mantener el orden familiar. Queda pues un vasto territorio por recorrer para que las mujeres puedan ser definidas, en términos heideggerianos, como Ser-en-el-mundo en lugar del «ser-en-su-casa» (Molina Petit, 1994: 135).
Con vocación de denunciarlo surge la nueva propuesta del colectivo Offmothers quienes tomarán como hilo conductor de su discurso la representación en cartón de seis casas blancas: suspendidas desde el techo, dispuestas sobre las paredes o depositadas en el suelo, cada una de ellas sugiere una alegoría de la casa como situación existencial. Simples en su forma, monocromas en su blanco pero complejas en todo lo que evocan.
Animales domésticos
Artistas: Colectivo Offmothers | Facebook
Fechas: Del 1 al 24 de septiembre
Lugar: Centro de Cultura Antiguo Instituto de Gijón | Gijón