Corpus: Un recorrido por la obra de Helena Almedia en el IVAM
Corpus: La transición de Helena Almeida
Hasta el 28 de junio se pude visitar Corpus de la artista Helena Almeida (1934,Lisboa) en la Galería 7 del Instituto Valenciano de Arte Moderno.
La muestra, comisarada por João Ribas y Marta Moreira de Almeida, está compuesta por 52 obras. Pinturas, fotografías, vídeos y dibujos, realizados por la artista portuguesa desde los años 60 hasta la actualidad.
Considerada una de las grandes artistas contemporáneas portuguesas, Almeida se ha impuesto como una imprescindible figura de la performance y el arte conceptual.
Cinco décadas de creación y una única protagonista, ella misma. Siempre vestida de negro. Siempre girando en torno al cuerpo y la representación. Su cuerpo como objeto y sujeto de creación.
“Mi obra es mi cuerpo, mi cuerpo es mi obra”
La auto-representación como fórmula. Convertido el cuerpo en instrumento con el que intervenir, comunicar y crear espacio nos lleva a perdernos en un conjunto en el que creadora y modelo son una, como lo son cuerpo y espacio. Elude hablar de autorretratos, entiende que es su cuerpo, completo y universal el que la representa.
Y así, la artista ocupa la obra. De un lado, pasiva como modelo de otro, empoderada, pasa a ser parte activa mediante la elaboración tanto física como conceptual de la creación.
De los 60 a la actualidad
El recorrido por la obra de Almeida se inicia en Corpus en sus primera pinturas abstractas a finales de los 60, cuando pretende “escapar del cuadro, escapar a los límites del espacio y de esa disciplina artística”.
Ya en los 70, la artista introduce la fotografía en sus trabajos, crea imágenes que contienen a un tiempo, pinturas, esculturas y peformances.
Para el comisario Joao Ribas el trabajo de la artista es básico dentro de la representación artística del cuerpo femenino y destaca “el carácter evolutivo que define la obra, que empezó a través de la pintura y la fotografía y pasó al dibujo y al vídeo”.
Fotografías en blanco y negro en las Almeida adopta posturas que forman parte de elaboradas coreografías previas. Compositivamente complejas son producto de largas horas dibujando o grabando vídeos hasta conseguir lo necesario para que, una vez todo dispuesto, su marido, Artur Rosa, dispare y recoja justo ese instante buscado, ese momento en el que la artista se hace dueña del espacio, lo hace propio y se funde con él.
Blanco y negro desgarrado por un azul klein que simboliza el espacio y la energía, irrumpinendo sin necesidad de permiso alguno. Así lo hizo en las distintas series de Pintura habitada (1976). Vemos sólo una parte del cuerpo de la artista que siempre aparece en segundo término. Y, omnipresentes, los trazos de color azul. Dos planos independientes que buscan alterar el espacio con la ayuda del espectador. Una expresiva composición cargada de narrativa, dirigida precisamente a la mirada de ese observador.
Una obra tan contemporánea como vigente
Con la serie Ouve-me (Escúchame, 1978-80) la producción de Almeida recoge la necesidad de evidenciar y exhibir imágenes de la mujer ignoradas por la mirada occidental. Cada pieza conlleva una gran carga emocional. Un discurso que lamentablemente continúa vigente hoy en día.
Poco a poco la autora reduce sus movimientos y su expresión a un contorno negro como en los dibujos y las fotografías de la serie Dentro de mí (1995-1998). La serie se expone entera por primera vez en el IVAM.
La simbología femenina del tacón de aguja de Seduzir (2002) se descalabra con la pincelada roja que aporta el drama. Concentrada la mirada en las piernas, aparece inesperadamente el color. Oculto a inoportunas miradas ¿se puede disimular la violencia escondiéndola?
Corpus
Artista: Helena Almeida | Web
Fechas: Del 16 de febrero al 18 de junio de 2017
Lugar: IVAM | Valencia
Imagen destacada: © Helena Almeida | Pintura Habitada (1975)
@gva_IVAM
Recorrido por la exposición de la mano de sus comisarios
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