Pintor, fotógrafo y diseñador gráfico, Alec Huxley (San Francisco) crea pinturas de iluminaciones restrictivas, claroscuros que escapan del clasicismo y un surrealismo implícito en la narrativa.
Sombras, luces, geometrías que desbarantan estructuras, lugares tenebrosos, personajes trajeados que portan cascos espaciales en una de sus dos ambientaciones preferidas, la ciencia ficción; la otra, los westerns. nos deja la misma sensación lúgubre, pero desde otra perspectiva temporal completamente distinta, o quizá no, quizá el tempo es el mismo, solo cambia el vestuario.
Obras llenas de contraste y drama, figuras plasmadas justo en el instante de la acción, haya o no movimiento, enrocamiento en sueños propios y ajenos. Ambientes post-apocalípticos donde resulta normal convivir con la muerte, donde la única manera de seguir adelante es convivir con el peligro, la muerte, y la vida, siempre pujante.
Animales dominando la escena, demonios, máscaras, mundos que oscilan entre lo salvaje y la perfecta civilización futurista. Y una vuelta de tuerca más a lo oscuro, lo perdido, lo lejano…
