Chema Madoz y sus 35 nuevas miradas en la Galería Elvira González
Hace unos días tuve el privilegio de asistir a la master class que Chema Madoz impartía en el Museo de Arte Contemporáneo Es Baluard, más de tres horas que pasaron volando en las que el artista fue desgranando el porqué de su obra, cómo comenzó a amar el objeto, cómo hay un instante de comunicación entre él y el observador aunque siempre permaneciendo abierto a interpretaciones dispares, interpretaciones que a veces le sorprenden y otras le emocionan.
Llegué a la fotografía por pura casualidad, me vi inmerso en ella en el momento en que descubrí que te daba la posibilidad de establecer una comunicación con el espectador, cómo se podía jugar con su mirada, cómo era un medio a tomar en cuenta en tanto una especie de vocabulario que te permitía establecer un dialogo.
Chema Madoz, ampliamente conocido y reconocido, fue Premio Nacional de Fotografía en el año 2000 y ha sido protagonista de una de las muestras más destacadas en la edición de 2014 de Les Rencontres d’Arles (Francia), el festival de fotografía europeo de mayor relevancia internacional.
Cada vez más, he ido despojándome de lo superfluo para fijar mi mirada en el objteto, que adquiere un carácter más gráfico y que, en muchos casos, pierde su esencia aunque sigue siendo reconocible.