Una obra intensa en la que la crítica social y política se abre paso entre escombros; como si con esta puesta en escena Emanuela Sommi (1955, Roma) se sintiera más cómoda mientras retrata situaciones convulsas; un universo surrealista para hablar de la más cruda realidad.
La autora recrea mediante el arte digital una perfecta analogía entre las ruinas que plasma en sus creaciones y la quiebra de la sociedad occidental.
Violencia, delincuencia, drogadicción, feminicidio…. lacras comunes con los que estamos acostumbrados a luchar, pero surgen otras, menos visibles, en despachos, en las altas esferas, personajes enriquecidos, pocos, a costa del sufrimiento de muchos, personajes que se enseñorean conduciéndose como lo hacían en aquellos tiempos que la autora refleja en su obra, cuando la esclavitud era legal y deseable… para unos pocos, en detrimento de muchos…. como ahora; y lo hacen tan bien que consigue que crezcan las llamémosles “ordinarias”.
Mundos apocalípticos, rotos, aplastados por el tiempo como las vivencias de quienes pululan por sociedades incomprensiblemente crueles. También mundos redivivos, resurgidos de sus cenizas, esperanzas, sueños por cumplir.
© Emanuela Sommi | Web
Mila Abadía | Jose L. Calleja
